sábado, 14 de noviembre de 2009

No sobreviviremos

Cuando vuelvo por la noche hacia mi casa me gusta pasar por la calle Serrano. En condiciones normales siempre la he evitado, es una calle aburrida, pero últimamente es justo al revés. El motivo es que nuestro querido alcalde, "el viagra" (ya sabéis, porque tiene toda la ciudad levantada), ha emprendido la obra del escorial en mitad de dicha calle.

El espectáculo de madrugada es sobrecogedor, lo más parecido a un escenario de post-apocalipsis urbano: La calle destrozada, maquinaria pesada repartida por ahí, como enormes cyborgs oxidados hace muchos años. Y ni un alma, todo es silencio. Como digo, me gusta ir por ahí. Me permito fantasear con que soy un superviviente de algún terrible desastre, que pertenezco a la última estirpe de la civilización y que todavía hay esperanza.

Pero ayer me enfrenté a la realidad. Caminaba yo recreándome en todas estas fantasías cuando oí unos ruidos delante, unos gorgeos blasfemos habría dicho Lovecraft. Avanzé intrigado, sin estar seguro de si el ruido era real o producto de mi imaginación.

Y allí delante, en un recoveco de las obras, amparadas por la oruga de un ciclópeo bulldozer, vi a tres chicas, apenas unas niñas. En mi mente imaginé que habrían nacido después de el colapso, claro. Una de ellas se encogía sobre si misma, atenazada por el espasmo del vómito, mientras sus compañeras la socorrían, una sujetándole el pelo, en el gesto universal de camaradería femenina, y otra sujetándola a toda ella, para que no acabase en el suelo, rebozada entre los restos de una escasa cena y una cantidad de alcohol exagerada para su pequeño cuerpecillo.

Y entonces comprendí que no hay esperanza. Aunque sobrevivamos al desastre, al apocalipsis tecnológico, a los zombies o a lo que sea que se nos venga encima, no sobreviviremos. Nosotros y nuestra estupidez seremos nuestro propio fin.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo también había mandado a la mierda a la humanidad, pero quizás aún hay esperanza. ¿De dónde la sacamos? De uno mismo yo creo.

Me gustó cómo imaginas :) suena genial.

Muchos saludos, abrazos y besos. Bye!

Dinorider d'Andoandor dijo...

el viagra, jaja, al de acá le digo Gothmog ... por causar tanto destrozo en La Ciudad de los Reyes (el sobrenombre arcaico de esta ciudad).

fea la visión del final
fea
:S

Khazum dijo...

Buen sarcasmo. Nuestro principal problema somos nosotros mismos: "Homo homini lupus est"

Verificación: Latex

Lograi el Luciérnago dijo...

Tal vez la extinción sea lo que nos merezcamos...